sábado, febrero 15, 2014

La normalización cultural con el Estado sionista a tarvés de "el Instituo Cervantes de Tánger"



CULTURA/TÁNGER:
EL CERVANTES Y SU POCO AMISTOSA EXPOSICIÓN
 O
 Said Jadidi
En colaboración con el Centro Serafad de Israel, el Instituto Cervantes de Tánger organiza desde el próximo día 18 hasta el 14 de marzo próximo en su sala de exposiciones una exposición con el titulo: “Los hispanojudíos en Marruecos y sus diásporas”.
La verdad es que es más que difícil comprender lo que significa el mal inventado término “hispanojudíos de Marruecos” porque todos lo judíos marroquíes eran/son súbditos de S.M. el rey (Se conoce la actitud del llorado S.M. Mohamed V cuando el gobierno Vichi le pidió la extradición de los judíos marroquíes) o lo que es igual súbditos marroquíes que, en principio, debieron/deben haber padecido las mismas desventuras que sus compatriotas de otros credos en el Reino de Marruecos durante la era del protectorado en Marruecos.
Luego viene otra paradoja: “Con la colaboración del Centro Serafad de Israel”. Para los marroquíes mientras que las víctimas de ayer  (el holocausto alemán) se han convertido en victimarios de hoy (crímenes contra el pueblo palestino), Israelí y los israelíes, entre ellos naturalmente los sefarditas, son enemigos de la nación árabe de la que formamos parte.
De tal manera que la exposición del próximo día 18 en el Cervantes de Tánger en tierra marroquí (árabe) seria como si la agregaduría cultural de le Embajada de Marruecos en Madrid organizara una exposición sobre ETA en Madrid, Barcelona o Granada.
Amalgama por amalgama: Los judíos (Sefarditas) eran antes de la Inquisición (su expulsión con los musulmanes que los llevaron al Andalus) súbditos de un “Estado” musulmán: AL ANDALUS y al ser expulsados, los acogió con los brazos abiertos otros Estados musulmanes: Principalmente Marruecos, pero también Túnez y Argelia.
A todos los marroquíes y los musulmanes en general nos gustaría ver un día a Israel y a los israelíes cometer menos crímenes contra el indefenso pueblo palestino y aspirar a una solución justa y equitativa para el pueblo palestino, con su país cuya capital debería ser Al Quds Oriental (Jerusalén oriental).
Entonces desaparecería todo odio entre nosotros y seriamos todos hermanos.


La normalización cultural con el Estado sionista a tarvés de el Instituo Cervantes de Tánger